, por el trazado de sus pistas y la configuración de la propia estación. En primer lugar, si aún no conoces la estación te sorprenderá descubrir que llegas con el coche hasta la cota máxima (2.024 metros), por lo que desde el mismo parking tendrás a tus pies una espectacular panorámica de todo el dominio esquiable, 14 kilómetros de pistas por cuyos remontes pueden moverse más de 13.000 esquiadores por hora. Y desde allí mismo podrás acceder a las pistas de debutantes.
En Valdelinares hay 5 pistas verdes, las ideales para un principiante como tú. Se trata de Debutantes I, Debutantes II, Colmenilla, Hornillo y Bujarones. Después de probarlas todas, te aconsejamos hacer un descanso para reponer fuerzas, en la base de Bujarones en la Cabaña 1900 (está en esa cota), un precioso edificio de madera, con un innovador diseño, en mitad de las pistas y rodeado de árboles. Allí podrás disfrutar también de unas espectaculares vistas en el Mirador de Valdelinares.

En Valdelinares dispones también des 5 pistas azules (El Bosque, Central, Villarejo, La Mina y Monegro), con algo más de dificultad que las anteriores y por las que podrás empezar a deslizarte cuando ya bajes las pistas verdes con soltura. A través de las dos últimas, La Mina y Monegro, llegarás hasta la cota mínima de la estación (1.700 metros). Si quieres volver arriba, no tienes más que tomar el telesilla Valdelinares o El Bolage, de 4 plazas, para seguir disfrutando de un descenso tras otro. Tú eliges la pista que más te apetece o donde más has podido disfrutar.
Por supuesto, no descartes contratar los servicios de un monitor para que te guíe en tus primeros pasos sobre la nieve y evitar cometer los típicos errores de principante.

Y, si además de esquiar, te apetece patinar sobre hielo, ¡no dejes de acercarte a la nueva pista de hielo de la estación, ubicada junto al aparcamiento, y que se convertido ya en uno de los lugares más visitados de la estación. Después de quitarte los esquís, puedes calzarte los patines y disfrutar mientras te deslizas sobre el hielo al aire libre, en un precioso paraje, a más de 2.000 metros.
Ya verás cómo, antes de lo que imaginas, estás moviéndote con soltura tanto por la pista de patinaje como por las de esquí. ¡Feliz aprendizaje!