El Aneto no tiene secretos para él, ni el macizo de las Maladetas, ni cualquiera de los tresmiles de la zona de Benasque. A Antonio Lafón le gusta la montaña por encima de todo, ha subido cientos de veces al Aneto –aunque no las ha contado- y no se imagina vivir lejos del valle de Benasque. Es el responsable de La Renclusa, el refugio –a 2.140 m de altitud- en el que duermen buena parte de las alrededor de 15.000 personas que cada año suben al Aneto
–desde allí quedan unas cinco horas de ascensión-, aunque también hay quien lo hace sin pasar por el refugio, o quien pasa por La Renclusa de camino a otros lugares no menos espectaculares, como la Cresta de Salenques o el pico Mulleres. Antonio tiene 59 años y lleva 44 en el refugio.
Toda una vida en el refugio…
Sí, empecé a los 15, venía a ayudar a mi tío, que era quien lo gestionaba entonces. Y aquí sigo, con la familia. Vivimos entre el refugio y Benasque, y yo no quiero estar en otro lado mientras el cuerpo aguante… Este es un refugio de referencia, donde están las montañas más altas y los recorridos más largos del Pirineo y por donde pasan entre 8.000 y 9.000 personas cada año. Tenemos 93 plazas.
¿Qué es lo mejor de vivir allí?
Lo primero, la montaña; despertarte y ver la montaña en lugar de un edificio y cemento enfrente; el trato con la gente… poderles informar de rutas, dificultades de escalada, de la meteorología, de los riegos en verano y en invierno…
¿Y lo peor? ¿es muy dura la vida en el refugio?
Aquí no hay nada fácil ni nada difícil. Hay gente que cree que esto es duro. Son formas de verlo, si piensas que te puedes quedar sin agua o que te puede entrar la nieve por algún sitio… Pero cada vez estamos mejor preparados, tenemos calefacción y buenas condiciones, yo no diría que esto sea una vida dura. Si un día hace mucha ventisca y no puedes salir, pues te quedas en el refugio. No pasa nada. Y aunque no hay cobertura de móvil tenemos una cabina a través de Internet para que cualquiera que tenga una necesidad pueda llamar. Esto es duro si no te gusta la montaña. Yo soy montañés y montañero, si no no estaría aquí. ¡Me encanta la montaña!
¿Cómo llevan las provisiones hasta allí?
Normalmente empleamos un helicóptero, aunque todavía tenemos dos burras, que a veces transportan cosas, aunque no hacen muchos viajes. Y subimos muchas cosas cargadas en la mochila cuando hace falta. Para llegar hasta allí desde Benasque hay que hacer 15 km en coche y unos 40 minutos andando. Ya casi no quedan expertos para cargar mulos, que es como se trasladaban antes las cosas, así que a veces hay que ir a por cosas necesarias y cargarlas en la mochila.
Además de guarda de la Renclusa es profesor de esquí, ha sido escalador, guía de montaña…
Sí, soy profesor en Cerler. Y eso, unido a haberte criado aquí y conocer la nieve te da recursos para muchas cosas, sabes dónde te metes. No es lo mismo esquiar en la estación que hacer esquí de travesía por la zona del refugio o disfrutar de la bajada de Maladetas. Lo de escalar ya lo dejé, cuando bajas de nivel y ganas kilos ya es complicado. Nunca me gustó la escalada de pared, lo mío era crestear, hacer travesías por aristas de montaña. Y de guía de montaña he trabajado 12 años, y alguna semana subía 6 veces al Aneto. Era mi trabajo. Ahora subo menos.
¿Qué consejo daría a quien va por primera vez por allí?
Que vengan informados y bien equipados, y que hagan caso a las recomendaciones que les hacen los expertos. Algunos pasan sin informarse y luego pasan cosas… hay quien cree que puede pisar un glaciar con zapatillas o ir simplemente en camiseta en verano. Deberían informarse en los refugios, estamos abiertos todo el año por algo. Queremos que la gente disfrute de la montaña con el mínimo riesgo. Y yo aconsejo que vayan con un guía profesional, es la forma de ir seguros y prevenir riesgos.
¿Y qué recomendaría ver a quien no conozca esta zona del Pirineo?
Ahora mismo los bosques están espectaculares. Por cualquiera de los valles de Benasque, hay unas vistas impresionantes: el valle de Estós, el de Vallibierna, el de Lliterola, el de Mulleres… La zona del Aneto, con los glaciares blanquitos desde que nevó, está precioso… Simplemente paseando por allí y haciendo fotografías puedes ser la persona más feliz del mundo.
noviembre 07, 2014
Antonio Lafón, guarda del refugio La Renclusa: “Soy montañés y montañero, si no no estaría aquí”
El Aneto no tiene secretos para él, ni el macizo de las Maladetas, ni cualquiera de los tresmiles de la