Sabes que un buen calentamiento antes de lanzarte a las pistas es muy importante, que previene lesiones y prepara los músculos para una larga jornada de esquí. Sin embargo, las ganas de disfrutar de la nieve hacen que a veces se te olvide dedicar unos minutos a hacerlo, ¿verdad? Por eso te vamos a proponer tres sencillos bloques de ejercicios. Con ellos, en menos de 15 minutos habrás calentado desde los pies hasta la cabeza.
Movimientos circulares: tobillos, rodillas y caderas. Puedes calentar los tobillos, las rodillas y las caderas de la misma forma: a través de movimientos circulares. Comienza el calentamiento con la punta del pie en el suelo y rotando el tobillo. Lo ideal es hacer círculos en ambos sentidos y hacerlo con cada pie entre 15 y 20 segundos. Cuando hayas acabado, flexiona las rodillas y haz un gran círculo con el que se toquen ambas rodillas durante 15 segundos y otro, en sentido contrario, durante otros 15 segundos. Después trabaja las caderas haciendo grandes círculos con ellas hacia la derecha primero y la izquierda después, durante el mismo periodo de tiempo, como si trataras de mover un aro y tuvieras que hacerlo girar. También puedes calentar las caderas con un gran movimiento hacia delante y hacia atrás.
Estiramientos: tronco, brazos y cuello. Empieza calentando la zona del tronco girándolo a un lado y a otro durante, aproximadamente, 20 segundos. Después, lleva tus brazos hacia delante y hacia detrás, como si te estuvieras abrazando con tus propios brazos, para estirar la espalda. Para calentar los hombros debes hacer grandes círculos, hacia delante y hacia atrás, con los brazos estirados durante 20 segundos o levantar los hombros hacia arriba haciendo pequeños círculos en ambos sentidos. Después, calienta las muñecas, es muy importante que lo hagas. Unos suaves movimientos circulares, en ambos sentidos, pueden ser fundamentales para evitar lesiones. Para finalizar con la parte superior del cuerpo, no te olvides del cuello. Gíralo de izquierda a derecha, de arriba hacia abajo y después haz círculos para evitar tensiones cuando acabes tu jornada de esquí.
Entrar en calor: piernas. Aunque ya habías calentado tobillos y rodillas, la última parte del calentamiento incluye sencillos ejercicios en los que las piernas van a mover bastante, aunque vas a calentar todo el cuerpo. Prepara todos los músculos de las piernas moviéndolas hacia delante y hacia atrás, ayudándote con los bastones. Hazlo durante 15 segundos con cada pierna. También puedes hacer una variante de este ejercicio, estirando las piernas a ambos lados del cuerpo y cruzándolas por delante. Por último, da pequeños saltos flexionando mucho las rodillas, como si fueras a impulsarte hacia adelante. ¡Ya verás como entras en calor rápidamente!
En menos de 15 minutos, estarás listo para empezar tu jornada de esquí. Además de prevenir lesiones, ¡tendrás muchas menos agujetas que de costumbre!