¿Has soñado alguna vez que volabas como un pájaro? ¿Imaginas hacerlo en el Pirineo entre los grandes picos que separan España de Francia? Tu deseo puede hacerse realidad: puedes planear por los cielos pirenaicos este verano en un parapente, guiado por un instructor, tanto en el entorno de Formigal-Panticosa como en el de Cerler, y disfrutar de una experiencia única.
El vuelo en parapente biplaza es una forma sencilla, y segura, de hacer tu primer vuelo y sentirte libre como un pájaro, con el Pirineo a tus pies. El monitor se encarga de todo, así que sólo tienes que relajarte y disfrutar de la experiencia. ¡No lo olvidarás!
Puedes probar la experiencia en Panticosa, donde se acaba de celebrar el Campeonato de España de Parapente Acrobático http://www.xn--campeonatoespaa-crb.es/. Lo harás de la mano de un piloto, y se te facilitará el casco, y el acceso hasta el punto de partida del vuelo. Lo pueden probar también los niños –a partir de 8 años- y se puede disfrutar en cualquier época del año. Ahora en verano necesitaréis llevar unas buenas zapatillas, una sudadera o cortavientos –según las condiciones meteorológicas-, gafas de sol y crema protectora.
Si estás en el valle de Benasque, puedes practicar parapente en Castejón de Sos y disfrutar de las mejores vistas imaginables de los picos más altos del Pirineo, el Aneto, Posets, Perdiguero…
¿Sabías que Castejón de Sos es la cuna del parapente en España? Allí se fundó la primera escuela de parapente y el pueblo se ha convertido en un centro internacional de referencia para pilotos y aficionados a este deporte por las fantásticas condiciones para el vuelo que ofrece la zona. Por eso es un lugar ideal para tener tu primera experiencia con un parapente, bajo la supervisión de un instructor de vuelo. Recuerda que no es necesario tener ningún conocimiento previo para disfrutar de esta actividad, sólo muchas ganas de disfrutar.