No queda nada para inaugurar la temporada en las estaciones de Aramón. Ya estás preparando tu primer viaje a la nieve y te encuentras con que tu equipo está en unas condiciones lamentables.

En ese momento te maldices a ti mismo y te preguntas ¿por qué no habré dedicado unos minutos a adecentar todo antes de guardarlo ? Y con razón, porque no hace falta mucho trabajo para lograr que tu equipo no se deteriore mientras está en el armario. Desde Aramón os damos unos consejos muy fáciles y muy útiles para conseguir guardar tu equipo de esquí.

– Esquís
Es la parte del equipo que más desgastamos durante la temporada y por eso necesitan de una gran atención y cuidado. El rozamiento de las suelas y los cantos, que no paran de trabajar mientras esquiamos, se deteriora por el efecto de abrasión de la nieve y merma su capacidad de deslizamiento. Mucha de la seguridad que necesitamos como esquiadores es directamente proporcional al estado de los esquís. De esta manera, un canto en buen estado permitirá girar sin problemas y una suela correctamente conservada nos proporcionara el deslizamiento perfecto. Por eso no deberíamos esperar a que nuestras tablas estén llenas de surcos y no está de más que las llevemos a arreglar si les hemos metido mucha caña en las pistas.

Si los llevamos a arreglar antes de guardarlos al final de la temporada,  nos estamos asegurando de prevenir la oxidación. De todas formas, si no están muy machacados y no los quieres llevar a repasar, lo que hay que hacer sí o sí es limpiarlos muy bien, el barro y la humedad son aliados naturales del oxido. También es conveniente guardarlos por separado, si se puede, para evitar las rozaduras.

– Fijaciones
Después de seis meses en un armario las fijaciones pueden haber sufrido desgaste. Aunque no necesiten de un cuidado especial, no como los esquís, siempre hay que comprobar si su nivel de fuerza es el óptimo. Es recomendable hacerlas funcionar con las manos, como para despertarlas, y asegurarnos de que van a  funcionar correctamente en las pistas. Tampoco está de más aplicar un poco de aceite lubricante. Para asegurarnos de que no se van a dar de si y perder elasticidad en los muelles, es recomendable aflojarlas todo lo que podamos antes de guardarlas.

– Botas
Hay que ser cuidadoso con las botas porque hay que cuidarlas muy bien debido a sus numerosos engranajes. Lo fundamental a la hora de guardarlas es asegurarse de que no están nada húmedas. Conviene desmontar el botín para airearlas lo máximo posible y, una vez secas, guardarlas cerradas para evitar que se deformen.

-Bastones
Son los elementos del equipo al que menos atención prestamos. Antes de guardarlos tenemos que asegurarnos de que no hay ninguna base rota, y si la hay la sustituimos, o, si están torcidos, enderezarlos.

Esperamos que estos consejos os sean útiles y los pongáis en práctica para que vuestro equipo dure y dure…