¡Vaya nevadas están cayendo estos días! ¿¿Qué hacéis que no os habéis organizado todavía para venir por aquí??
Bueno, pues en este post nos toca la parte gastronómica, que, para nosotros, es una parte muy importante de nuestras escapadas de esquí.

En la Estación

Nosotros muchos de los días comemos en la estación. Empezamos pronto y ya sabéis, los peques, eso de “tirar” hasta la tarde con un sándwich no lo llevan bien.
Muchas veces comemos en Cota. Los cursillos empiezan y acaban allí así que es una buena opción. Los peques (a pesar de meterle una chocolatina o un “almuerzillo” en los bolsillos de la cazadora) llegan hambrientos de los cursillos y nos cuesta convencerles para que sigan esquiando así que, nada mejor que un rico plato de pasta en Cota 2000.

Encontraréis rica pasta, menú del día y también zona de hamburguesería y Puri y el resto de compañeros que está en la parte de menús os tratará estupendamente.
A nuestras niñas les encanta y les encanta luego quedarse jugando un rato con la nieve mientras los papás disfrutamos del sol J

Aquí va una recomendación: en temporada alta parad un poco antes de la una (una menos cuarto o así) o ya a partir de las dos y media -ya os hemos comentado que a la una acaban muchos de los cursillos de esquí-.
Una buena opción cuando hay alguien que no esquía o cuando tengáis algún peque en el Jardín de Nieve es comer en Ampriu. Está a unos 7 km de Cerler pero tiene aparcamiento al lado (no hay que coger silla). También tiene menú y pasta y una barbacoa dónde ponen ricas costillas, chuletillas, butifarra…y desde allí también salen cursillos.
Tiene parque y este año también han habilitado una zona con un carrusel que es la delicia de los peques.
Cuando los niños empiecen a estar más sueltos una excursión a la pizzería El Bosque les hará sentirse “muy mayores”. Contadle que es ya una excursión para “expertos” coged la silla de Rincón del Cielo y bajad poco a poco por la larga y ancha pista azul que baja hasta ella. Las pizzas están hechas en horno de leña y están buenísimas y también la pasta.

Recomendación: en temporada alta también hay gente y el restaurante no es muy grande. Llegad pronto antes de la una o una y poco. A las dos es cuando más gente hay. Tanto dentro como fuero estaréis fenomenal.
Un último comentario sobre comer en la estación. Si sois de los que lleváis vuestra mochila, nada os sorprenderá más que la cantidad de mochilas que se dejan en Cota 2.000 al lado de la silla de Cogulla. Las dejas allí todo el día y cuando quieras pasas a recogerlas. ¿A que eso no lo habéis visto en otras estaciones? ¿A que en algunas estaciones en cuanto os dais la vuelta os han robado hasta los esquís :-O? Bueno, pues es que esto… ¡es Cerler!

Más recomendaciones en el valle

Para nosotros cuando venimos por el valle es tan importante esquiar como… ¡comer! J Y es que el esquí abre el apetito y no hay nada mejor que compartir un rico menú con amigos o familia mientras te cuentas las “batallitas” del día… ¿a qué si?
Bien, aquí van varios de nuestros restaurantes favoritos. Probablemente no estén todos los que deberían pero es que últimamente, cuando venimos al valle… ¡nos encanta volver a nuestros sitios preferidos! Si a lo largo de esta temporada descubrimos alguno más prometemos ampliar este post J

En Cerler:

Mi favorito es la Borda del Mastín: acogedor y muy bonito. Era un antiguo establo de piedra. Tiene muy buena carne y muy buenos platos fuera de carta y suele tener una pasta del día. Recomendable: la carne de buey, las puntas de solomillo y el otro día comimos unas alcachofas…uhmmm, deliciosas. Por cierto ¡los postres también están buenísimos!

Más desenfadado y para tomar unas cervezas y unas tapas o un buen plato después está el Paralelo. Preguntad siempre lo que tienen fuera de carta. La última vez que estuvimos comimos: tataki de atún, solomillo, alcachofas y chipirones. Muy recomendable. Para los peques tendréis nachos, butifarra y croquetas entre otros platos.

Otro de los que frecuentamos es el Rincón. Pequeño, bonito: combinación de piedra y madera y acogedor. Con una chimenea dónde se asan las carnes que están deliciosas.
Como podéis comprobar tanto a nosotros, como a nuestros peques, nos encanta la buena carne  J y, la verdad, he de deciros que en cualquiera de los que os he comentado se está estupendamente. En la montaña, después de una buena jornada de esquí….¿se puede pedir más?
Tenéis también la opción de cenar en el restaurante del Hotel Monte Alba. El menú son platos combinados pero lo bueno es que es muy amplio, podéis llevar juegos y jugar a algo y podréis participar de las actividades que ese día organiza el hotel para los más peques aunque no estéis alojados: bingo, minidisco, etc…

En Benasque:

La Parrilla y el restaurante del Hotel Ciria: El Fogaril son dos de nuestros favoritos. Ambos con menú, ambos con un trato exquisito y ambos de gran calidad… ¡no os defraudarán!
Si os gusta el buen vino acompañado de alguna tapa no os podéis perder el Veedor de Viandas. Primero elegid un buen rincón y un buen vino. Luego acercaros a la barra y elegid una de sus múltiples y deliciosas tapas y… ¡a disfrutar de una buena velada!

Nos encanta también el Ansils en Anciles (precioso pueblo de recomendable visita que os contaremos en otro post).

¡Ah! Y para los más golosos o para dar una sorpresa a vuestros peques en el desayuno no dejéis de visitar la pastelería Laminero en Benasque. La tarta de queso, los croissants, las palmeras o en Reyes, el roscón de Reyes os encantará. Miguel prepara todo esto con mucho cariño y, además, hasta personaliza la caja de tu pedido delante de ti. ¡También imprescindible!

En Llanos del Hospital:

Aquí se encuentra el Hotel Llanos del Hospital. Esta escapada también os la contaremos en otro post pero que sepáis que si vais a esta estación a hacer esquí de fondo, raquetas o simplemente a pasear podréis comer en el hotel en la zona de restaurante con un menú de unos 23 euros o en la zona de cafetería que tiene bocadillos, raciones y platos combinados.
Bueno… ¿no se os está haciendo la boca agua? ¿Vais a tener días para probarlos todos ;?