Estás pensando en la nueva temporada de esquí, y seguro que aún no has olvidado la gran nevada de la temporada pasada, con esas imágenes de postal, esos paisajes blancos y esas espectaculares vistas de las estaciones cubiertas por un gran manto de nieve.

El mes de febrero arrancó con una nevada histórica en el Pirineo, por el volumen de nieve caída en una sola noche. Fue una de esas nevadas que dejan espesores de más de tres metros de nieve en las pistas y que además cubrió con una gruesa capa de más de 50 centímetros en muchos puntos, todos los rincones pirenaicos, pueblos y aldeas tanto del valle de Tena como el de Benasque. Y seguro que no has olvidado el vídeo viral de Jonathan Carrascal, el maquinista de Formigal-Panticosa que decidió comprobar personalmente el espesor de la nieve caída.

Si la viviste en directo ya sabrás que fue una de esas nevadas que vienen a barrer por completo esa repetida frase de que “ya no nieva como antes”. ¿Cuánto hacía que no veías a nadie esquiando por las calles de Sallent, Biescas, Jaca o Benasque? Sí, las calles se convirtieron en improvisadas pistas, por las que era más fácil transitar sobre esquís que en coche.
Pero esa no ha sido la única gran nevada que se ha registrado en el Pirineo en los últimos años. En abril de 2014 hubo una inusual nevada que dejó unas reservas de nieve récord para esa época del año, 1.064 hectómetros cúbicos de agua en copos, lo que superaba en un 41% el promedio de los cinco años anteriores, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), mientras media España disfrutaba de temperaturas casi veraniegas.
Y en febrero de 2013 hubo otra nevada de récord, con espesores de más de tres metros en las pistas de Cerler y Formigal-Panticosa, que dejó cortado el paso a Francia por el puerto de Portalet (a apenas un kilómetro de Formigal por la A-136) y que, al igual que en febrero de este año, también garantizó la presencia de nieve hasta el final de la temporada en todas las estaciones pirenaicas.

Aún así, estas grandes nevadas de los últimos años no alcanzan los datos de las registradas en febrero de 1956, recordado aún por muchos ancianos del Pirineo como ‘el año de la nieve’. Aunque han pasado casi sesenta años de aquella histórica ola de frío polar que recorrió toda Europa y los procedimientos de medición han avanzado notablemente, los meteorólogos aseguran que habría que retroceder a la era glacial para encontrar otra tanda de nevadas semejante en el Pirineo, donde no dejaron de caer copos de forma casi ininterrumpida durante todo ese mes de febrero y se registraron temperaturas bajo cero todos los días del mes, según los datos publicados en Historia del clima en España.
Pero, ¿cuándo nevará por primera vez este año?
Durante el mes de septiembre y ahora en octubre nos hemos levantado varios días viendo las cumbres con nieve. Nieve recién caída, que dicen que siempre es buena señal si se recibe en el mes de octubre «Cuando octubre truena, nieve da».

Pero si nos remontamos a los últimos años, según el portal Infonieve , vemos que realmente no es hasta finales de noviembre o principios de diciembre cuando la nieve cae de verdad.
En las estaciones del Gruop Aramón, (y suponemos que también en el resto de estaciones) fue en la temporada 2010-11 cuando la nieve vino más temprana. Fue el 29 de noviembre, y no paró de nevar hasta mediados de diciembre… ¿ocurrirá lo mismo este año?
Podéis consultar estos datos más ampliamente en este enlace de Infonieve, en éste, en éste y en éste 
Buceando en Internet, nos encontramos que el verano de 2010 fue uno de los más calurosos de la historia. No se ha vuelto a tener un calor así… hasta este año. Todos recordaréis el calorcito que hemos pasado este verano ¿no? Pues con estas estadísticas, a ver si se repite y podemos estar esquiando el 30 de noviembre!!!!!