Hoy te proponemos una excursión en coche desde las estaciones de Formigal y Panticosa. Pasaremos a Francia por el puerto de Portalet –el paso fronterizo del valle de Tena- y regresando por el de Somport –en el valle del Aragón- para continuar hacia Jaca y Biescas, y regresaremos al punto de partida. La ruta transpirenaica atraviesa lugares emblemáticos como la estación de Canfranc o el fuerte de Portalet, en el lado francés.
Es una ruta pensada para pasar todo el día. Podrás disfrutar con calma de los atractivos urbanos, paisajísticos y gastronómicos de la zona. Y, por supuesto, de grandes construcciones y pequeños pueblos, impresionantes vistas y tranquilas praderas. Y todo mientras degustas exquisitos quesos y patés caseros a la venta en casi todos los pueblos de la ruta.
Desde Formigal salimos hacia Francia por la A-136. Atravesamos el puerto de Portalet -apenas dos kilómetros al norte de la estación-. Desde allí, continuamos por una estrecha y sinuosa carretera sin apenas arcén. La carretera atraviesa el Parc National des Pyrénées Occidentales hacia el norte, es la D934.
Tras dejar a la derecha un desvío hacia Artouste –donde en verano funciona un tren turístico que circula a más de 2.000 metros de altura- continuamos hacia Laruns. Este es uno de los pueblos más grandes de la zona donde puedes hacer una parada para probar sus exquisitos croissants. La carretera continúa hacia el norte hasta llegar al pueblecito de Bielle, donde puedes tomar un desvío hacia la izquierda para dirigirte al valle d’Aspe por la D294 –o puedes continuar hacia el norte si quieres adentrarte más en Francia y tomar después el desvío por la D918 o, incluso, seguir hasta cruzarte con la E2 y visitar Olorón, un municipio de 11.000 habitantes.
Cette-Eygun ofrece una panorámica del Pirineo francés
Sea cual sea tu opción, en el camino de regreso a España por el valle de Aspe no dejes de visitar la parte alta de Cette-Eygun, un pequeño pueblo de apenas 80 habitantes y dividido en dos zonas –Cette e Eygun, una a 550 metros de altura y la otra a nada menos que 2.560 m– desde donde disfrutarás de una impresionante panorámica del Pirineo francés.
La siguiente parada del camino es el Fuerte de Portalet, una impresionante obra de la arquitectura militar del siglo XIX construida de forma escalonada sobre la roca, en pleno Camino de Santiago. Está ubicado en Urdós (Vallée d’Aspe), a tan solo 6 kilómetros de la boca francesa del túnel de Somport. Las vistas son de vértigo, aunque solo se puede visitar por dentro durante los meses de julio y agosto.
A partir de allí termina el tramo francés de la ruta. Puedes regresar a España a través del túnel de Somport –de 8 km de longitud- si quieres evitar el tramo de más curvas de la carretera. Una vez en España, no dejes de visitar la estación de Canfranc, la antigua estación internacional de tren –a la que ahora solo llega un tren regional- que impresiona tanto por su impresionante fachada como por su interior –ahora visitable tras años de abandono-, por algunos viejos trenes de madera destrozados que aún conserva en los andenes traseros y por la historia que tiene detrás, con documentos que revelan el paso del oro nazi a través de esa aduana.
La Ciudadela, una antigua fortaleza pentagonal
Desde Canfranc continuamos hacia Jaca, a 20 kilómetros al sur por la N-330. Allí puedes visitar la ciudadela, una fortaleza pentagonal, con un puente levadizo y un foso donde pastan los ciervos. También la catedral –la primera románica de España, construida en el siglo XI-. Y no dejes de dar un paseo por la calle Mayor y las calles que la rodean mientras degustas los exquisitos dulces de sus pastelerías.
Desde Jaca debes continuar por la N-330 hacia Sabiñánigo. Y desde allí, por la N-260a hasta Biescas para tomar después la A-136 para regresar al punto de partida. Esperamos que hayas pasado un buen día por el Pirineo aragonés y francés.