Rutas de senderismo, en BTT, pequeños desplazamientos en coche… La oferta de actividades veraniegas de ocio es enorme en el Pirineo aragonés. Si pasas tus vacaciones en el Valle de Tena, te recomendamos tres excursiones por los alrededores de Formigal-Panticosa que no te debes perder.
A pie al ibón de Piedrafita
La excursión que te proponemos es muy sencilla, puedes ir con niños ya que el recorrido es apto, y muy divertido, para ellos. Y al final, todos tendréis una gran recompensa: ¡daros un chapuzón!
Este lago de origen glaciar está ubicado en el término municipal de Piedrafita de Jaca, a donde podréis llegar en coche. Lo mejor es dejarlo en el aparcamiento de Lacuniacha. Desde allí sale la pista que, en alrededor de 45 minutos –a paso de niño y con paradas- os conducirá hasta el ibón. Una ruta fácil para que toda la familia disfrute de la montaña, ¡y de un refrescante baño veraniego!
En coche al sur de Francia
¿Quieres recorrer los valles del otro lado del Pirineo? Podrás degustar sus exquisitos quesos y patés franceses. Lo tienes muy fácil, sólo tienes que seguir la A-136 hasta el paso fronterizo del Portalet. Ya en Francia, continuar por la D934, una estrecha carretera que recorre el Parque Nacional de los Pirineos, con pequeñas y escasas poblaciones en un precioso entorno natural, y que te llevará hasta el Lac de Fabrèges. Os sorprenderá al pasar la impresionante pared de su presa. Si continúas por carretera tres kilómetros más hacia el norte llegaréis a Gabás, un pequeño pueblo en el que podréis comprar el rico queso de oveja que se elabora artesanalmente -el olor es muy fuerte, pero te aseguramos que no te arrepentirás de probarlo, ¡una delicia!-, o un exquisito paté de campaña.
Bordeando el lago podéis llegar al acceso al tren de Artouste, al que se llega en telecabina. ya que circula a más de 2.000 metros de altura. Es el tren que circula a mayor altura de toda Europa. Se trata de un recorrido ideal para hacer con toda la familia. Disfrutarás de fabulosas vistas del valle, del pico Midi d’Ossau (2.884 m) y de los lagos de Ayous y Fabrèges. Y está a tan solo 17 kilómetros de Formigal.
De turismo a Jaca
Nuestra tercera recomendación es una visita a Jaca. Además de callejear por el casco histórico, no dejes de visitar la ciudadela. También conocida como Castillo de San Pedro, es una fortaleza pentagonal perfectamente conservada. La puedes visitar por dentro y por fuera, desde sus glacis, desde donde verás los ciervos que viven en el foso (hay cerca de una veintena). Tampoco te pierdas la catedral, la primera románica de España. Construida en el siglo XI, el templo alberga un museo en su interior.
Cuando quieras reponer fuerzas, la plaza de la catedral es un estupendo lugar para sentarse en una terraza y degustar algunas ricas tapas, una extendidísima costumbre en Jaca, con una gran y exquisita variedad. O probar, en plato grande o pequeño, productos típicos de la zona como el tomate rosa, las migas o el ternasco. ¡Y puedes regarlas con un buen vino del Somontano! Antes de abandonar Jaca también te aconsejamos visitar una pastelería, ¡descubrirás deliciosos dulces!