Déjate sorprender por el sonido de las hojas de los árboles que bailan al son de la brisa, por el rugir de sus barrancos y cascadas, o por el silbido del viento. Sendas, lagos y cumbres quieren conquistarte con su ‘magia’.

Vive el placer de respirar el aire puro de la montaña y deleitarte con su belleza. La del pico Anayet que se refleja en su ibón como si de un espejo se tratara; o la del arco de Piedrafita, que tallado por la erosión y escondido entre las laderas de la Partacua, te ofrece una singular foto y una privilegiada vista del valle de Tena. Como si de un misterio se tratara, en el Forau de Aiguallut desaparecen tras una cascada y bajo la tierra las aguas de los glaciares del valle de Benasque. Y por supuesto, el imponente Aneto que corona la cordillera pirenaica con sus 3.404 metros.

En Teruel, no te pierdas, la ruta del Arquillo de Guadalaviar y el paseo por Camarena de la Sierra y sus fuentes, o las impresionantes vistas realizando una de las etapas del GR-8, la que discurre entre Valdelinares y Alcalá de la Selva.

Hay senderos y excursiones para todos los niveles. ¡Cálzate las botas y ven a conocerlos!